Marina Herlop a menudo se describe como pianista, un remanente persistente de su formación clásica. Pero lo que verdaderamente la define es su espíritu de aventura y experimentación: el intrincado engaño de su voz, trazando grupos rítmicos alrededor de los lechos musicales más sutiles, una producción electrónica sublime, desorientadora a ratos y siempre sorprendente, pero sobre todo una elegancia íntima y espectral en cada una de sus canciones.

Tras tres álbumes de estudio, Nanook de 2016, Babasha de 2018 y Pripyat en 2022, Marina Herlop regresa este otoño con Nekkuja, un nuevo trabajo editado por PAN donde sus sentimientos más cálidos salen a la superficie.

Marina Herlop is often described as a pianist, a lingering remnant of her classical training. But what truly defines her is her spirit of adventure and experimentation: the intricate hoax of her voice, tracing rhythmic groups around the most subtle musical beds, a sublime electronic production, disorienting at times and always surprising, but above all an intimate elegance and spectral in each of his songs.

After three studio albums, Nanook from 2016, Babasha from 2018 and Pripyat in 2022, Marina Herlop has returned this fall with Nekkuja, a new work released by PAN where her warmest harmonies and textures come to the surface.